ALUPA EDITORIAL presenta Inercias de Juan Carlos Vellido

diciembre 3rd, 2014

El 18 de noviembre salió a la venta Inercias. Un cuento de (des)amor ilustrado, escrito por Juan Carlos Vellido, con ilustraciones de Javier de Juan y prólogo de Fernando León.

PortadaINERCIAS_prensa2Alupa Editorial festeja su quinto aniversario con la publicación de un texto que impresiona en cada una de sus letras, en cada una de sus palabras, escogidas, reflexionadas y analizadas para atraer al lector donde el protagonista se encuentra. Fernando León de Aranoa (su prologuista) lo define de forma magistral: “Inercias es, además, una declaración de amor a las palabras. El autor las elige como si apenas quedaran cien en el mundo, en un ejercicio de escritura en el alambre, de novela funambulista”.

No se concibe el texto sin las ilustraciones que lo acompañan, una para cada uno de los momentos de nuestros protagonistas. Javier de Juan juega con la imagen, como el autor lo hace con las palabras.

Los dos personajes, J y S, nos arrastrarán a su historia, con sus huidas, sus dudas y sus reencuentros, y nos harán partícipes de cada uno de sus avances y sus retrocesos. Conoceremos cómo es su historia de (des)amor y nos imbuiremos de cada uno de sus momentos.

45 escenas, 45 ilustraciones y un prólogo que dejarán huella en sus lectores.

Para más información:
Rosa Sanmartín/Esther Melo
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Cuando el mensaje está en lo que no se dice

septiembre 11th, 2011

En mayor o menor medida, casi todas las personas somos capaces de transmitir a nuestro interlocutor un mensaje que difiere en mucho, del significado literal que nuestras palabras dicen. Las transacciones ocultas significan decir cosas con segundas intenciones que no queremos manifestar abiertamente.

Desde la niñez, las personas aprendemos a utilizar los gestos y a modular la voz para enriquecer las posibilidades de la comunicación. Primero descubrimos como implicar emocionalmente a nuestros interlocutores, dándoles a entender con un guiño de complicidad, que lo que le decimos no es cierto; aprendemos a modular la voz para desdecir, recalcar o desacreditar nuestras propias palabras; utilizamos gestos de ironía, estupor o desagrado que tergiversan la información y provocan cierta hilaridad en el interlocutor; con nuestras manos somos capaces de transmitir unos datos opuestos a los que nuestras palabras dicen (tamaños, formas, proporciones, …); y así, poco a poco, descubrimos un lenguaje tan rico y amplio como el verbal que, en ocasiones, nos ayuda a transmitir eficazmente la información y en otras, nos traiciona.

Pero si en la comunicación interpersonal, el tono de la voz, la expresión facial y la expresión corporal, nos ayudan a revelar el mensaje oculto, en la comunicación a través de ciertos medios de información las cosas se complican. Por ejemplo, muchos especialistas en el medio aseguran que la ironía en la radio no funciona. A la dificultad de hacer patente la doble transacción o mensaje oculto, hay que unirle la imposibilidad de contrastar la información efectiva que ha recibido nuestra audiencia, ya que la información fluye en un único sentido.

A este respecto y a título de curiosidad, el ex futbolista escocés Andy Gray fue despedido de la cadena de televisión británica Sky Sports, por los comentarios que realizó, durante la retransmisión de un partido, sobre la capacidad de las mujeres para entender “la regla del fuera de juego». El imprudente locutor no reparó en que su broma tocaba uno de esos paradigmas mediáticos que nacen para limitar la libertad de expresión y se utilizan para destruir al oponente; ni tampoco, que el ambiente distendido y simpático que favorecía cierto tono de broma, no era compartido por los televidentes y podía llegar a ser malinterpretado, como finalmente ocurrió. Solo por curiosidad, ¿qué creen ustedes que hubiera ocurrido si una comentarista de deportes, en una situación similar, hubiese bromeado sobre la capacidad de los hombres para atender a más de un lance del juego simultaneamente?

Por su parte, la comunicación escrita también entraña ciertos riesgos, el tono de la voz, la expresión facial y la expresión corporal, es la que imagina el receptor del mensaje, no la que pretendía transmitir el emisor. Razón por la que, si me permiten el inciso, recomiendo ante una situación delicada, releer nuestros textos antes de su envío, utilizando diferentes entonaciones y simulando diferentes estados de ánimo y, ante la menor duda, utilizar paréntesis, coordinadas explicativas o emoticonos que nos permitan dejar clara nuestra intención.

En el periodismo escrito, cuando deseamos traspasar los límites de la legalidad, ya sea por falta de libertades o de ética profesional, disponemos de multitud de técnicas para decir lo que no estamos diciendo. Una de las más utilizadas,  por su simplicidad, es la inclusión de imágenes que tergiversan las palabras y aportan cierta ironía al mensaje. Veamos un ejemplo:

Tras cubrir una rueda de prensa ofrecida por el Partido Popular, el pasado 7 de septiembre, el periódico español “Público” y su filial “La Voz de Asturias”, más allá de limitarse a ofrecer las declaraciones de Esteban González Pons, portavoz del partido, nos ofreció su propia opinión e incluso, aportó algunas predicciones muy interesantes. Siempre que se considere opinión periodística, el tratamiento literal de la noticia es impecable, con la salvedad de un pequeño error de concepto, en el que la periodista asoció el Partido Popular Español con los conservadores en el Parlamento Europeo, en lugar de con el Grupo Popular y por la selección de la fotografía. Como podrán observar la imagen elegida podría inducir al lector a pensar que el Partido Popular Español, en general, y su portavoz, en particular, muy lejos de ser populares o, incluso conservadores, son próximos a ideas y prácticas fascistas.

Para aclarar el concepto, supongamos ahora que tras la gran repercusión mediática que tuvieron las fotografías en la playa de Leire Pajin, actual ministro de sanidad, política social e igualdad en España, hubiéramos publicado un artículo en el que pusiésemos de relieve que, el hecho de que la ministro haya decidido prevenir el sobrepeso y la obesidad educando a los españoles, para que se alimenten adecuadamente y hagan ejercicio, no justifica en manera alguna, mostrar a la opinión pública la propia obesidad de la ministro. Supongamos también que, además, decidiéramos piropear a la señorita Pajin, asegurando que es una chica muy «mona» que luce espectacular hasta cuando se despierta. La información es positiva, clara y carente de cualquier tipo de doblez, hasta que decidimos ilustrarla con la siguiente imagen:

Si el primer caso puede ser constitutivo de un presunto delito contra el honor del señor Pons, consagrado en el art. 18.1 de la Constitución Española, la difusión de las fotografías en la playa podría vulnerar el derecho a la intimidad de la señorita Pajín, ya que desvelan aspectos de su vida privada, resaltan sus defectos físicos y la representan en una situación que pueda hacer desmerecer su autoestima. Por lo que respecta a nuestro supuesto, no creo que vulnerase ningún derecho fundamental de la señorita Pajín, pero, a mi juicio, sería de mal gusto y éticamente reprobable.

A este respecto conviene resaltar que si usted no disfruta de la “impunidad” que le brinda pertenecer a alguno de los grupos mediáticos próximos al poder, el artículo 148 de la Ley Orgánica 5/1985, de 19 de junio, del Régimen Electoral General, establece que “cuando los delitos de calumnia e injuria se cometan en período de Campaña Electoral y con motivo u ocasión de ella, las penas privativas de libertad prevista al efecto en el Código Penal se impondrán en su grado máximo.”

A. Rodríguez
Redactor corresponsal España y Portugal
 

«El mejor tratamiento que se puede dar a una crisis es evitarla»

septiembre 6th, 2011

Entrevista a Jaime Avila, director general de Recursos de Mercado, en la que abordamos aspectos relativos a la crisis que atraviesa News Corporation, el grupo mediático de Rupert Murdoch, tras el escándalo de las escuchas ilegales realizadas por su periódico News of the World.

En la página Web de Recursos de Mercado (RdM), he leído que su valor diferencial como agencia no es la Comunicación de Crisis.

Cuentan del presidente de una compañía que ante una situación compleja preguntó a sus asesores por la persona idónea para cubrir un puesto tan delicado. Tras presentarle una serie de candidatos que habían afrontado con éxito crisis en sus respectivos departamentos o áreas de responsabilidad, el Presidente les preguntó: y … ¿no tenemos alguno que no nos haya metido nunca en problemas?

El mejor tratamiento que se puede dar a una crisis es evitarla o, si finalmente se produce, que pase casi desapercibida. El resto son brindis al sol y gestos a la galería que no ayudan en nada al cliente y, en ocasiones, si le perjudican. No dejan de sorprenderme las agencias que para demostrar su saber hacer, cada vez que tienen la oportunidad, reavivan en el recuerdo general las crisis de sus clientes para demostrar lo acertado de su actuación.

¿Qué opina de las recientes declaraciones de Steven Fink, presidente ejecutivo de la compañía de control de crisis Lexicon Communications Corp., a www.cnnexpansion.com, relativas al caso Murdoch?

En una crisis, en primer lugar hay que conseguir involucrar a la propia organización. Hay que conseguir cerrar filas, el problema es de todos y, de una forma u otra, todos vamos a salir adelante. Desde mi punto de vista, Murdoch y su equipo lo tenían muy claro, lo peor que les podía ocurrir es que empleados descontentos filtraran información no deseada desde dentro de la propia organización. En esta ocasión me atrevería a decir con casi seguridad que seguir las recomendaciones de Fink cuando dice:  «debieron haber purgado a los bellacos y debieron haber llevado a un equipo respetable y creíble de periodistas para que encaminaran el barco», hubiese sido un suicidio.

¿Cómo se involucra a la organización en un caso como éste?

Lo que para Fink es una estrategia extraña que no huele bien «No te apresuras a defender a alguien así que está tan cerca del fuego», para mi es una estrategia obvia y acertada. En primer lugar, hay que lograr la adhesión incondicional de las personas que van a asumir la responsabilidad de los hechos ocurridos. Hay que conseguir aislar el problema y la responsabilidad; lo que coloquialmente se conoce como “que no tiren de la manta”. Para ello, supongo que Murdoch, además de un futuro profesional prometedor, les habrá ofrecido lo que en este momento más necesitan, una defensa jurídica efectiva. En este sentido no creo que vayan a reparar en gastos, de esta manera, Murdoch, además, se aseguraría que los abogados que asesoran a los imputados, tienen en cuenta los intereses generales del grupo.

Por lo que respecta al resto del equipo, es suficiente con asumir un compromiso de futuro más o menos expreso. Nadie muerde la mano que le da de comer.

Steven Fink, cree que cerrar el  News of the World fue un error. ¿Qué opina Ud. al respecto?

Steven Fink se ha limitado a analizar superficialmente las consecuencias de uno de los múltiples escenarios posibles a los que se tuvo que enfrentar el equipo de Murdoch. Un escenario es una descripción de lo que podría suceder, así mantener en ese momento la actividad de News of the World, entre otros, hubiese supuesto:

– Añadir dificultades al cierre de la operación de compra de la BSkyB, una cadena de televisión que factura 6 mil millones de euros al año, por no sacrificar, temporalmente, un negocio de 150 millones de euros anuales de facturación, que se considera estratégicamente en declive. Es decir “Poner en riesgo la reina, por no querer sacrificar un peón”.

– Someter al periódico, durante todo el tiempo que dure la crisis, a un desgaste de imagen y credibilidad mucho mayor del que supone mantener la cabecera en standby.

– No asumir ninguna responsabilidad personal ante la opinión pública.

– Descargar la responsabilidad sobre un grupo de personas concreto, en lugar de sobre un “ente abstracto ”, el periódico.

– “Criminalizar” ante la opinión pública a parte del equipo del periódico, cuya colaboración se considera fundamental para intentar aislar el problema.

– Perder la oportunidad de transmitir veladamente a los poderes públicos, las consecuencias, en materia de empleo, que podría llegar a producir un exceso de presión sobre un grupo empresarial que emplea a más de 50.000 personas en todo el mundo; al tiempo que se llama la atención de 200 trabajadores sobre la importancia que tiene para su futuro profesional, cerrar filas frente al problema.

– Soportar una “publicidad negativa” añadida, de millones de ejemplares del periódico, foco del problema, en los puntos de venta. Lo que Fink denominaría, si hubiese reparado en ello, exponer públicamente “el cuerpo junto con el arma”

– Exponerse públicamente a un castigo de los lectores del periódico, que se evidenciaría ante la opinión pública con una caída significativa de las ventas, entrando en una dinámica negativa de perdida paulatina de difusión.

En este punto aparecería un nuevo foco de decisión que plantearía dos nuevos escenarios, si no cerramos News of the World, ¿mantenemos la actual línea editorial del periódico y nos arriesgamos a que ésta nos perjudique durante el proceso o damos un giro al periódico para evitar problemas y, entonces, nos arriesgamos a quedar en evidencia y perder a nuestros lectores?

… y así hasta donde se esté dispuesto a llegar en el análisis. Al propio equipo de Murdoch le llevará años saber si la decisión fue acertada o no, y nunca podrán estar seguros de los resultados que se hubiesen derivado de tomar una de las múltiples decisiones alternativas.

¿Habla Ud. de escenarios?

Aunque podemos asegurar que después de un número suficiente de jugadas a la ruleta, el número de rojos y negros, pares e impares, se aproximará al 50 %, nos resultaría materialmente imposible predecir el resultado de la siguiente jugada. Ni tan siquiera podemos estar seguros de que será una de las dos opciones más probables, ya que es posible que salga el cero.

Una crisis es una incertidumbre que procede de una desviación importante del entorno y pone en peligro el futuro e, incluso, la supervivencia de la organización. Por lo general, son situaciones muy complejas cuyo desenlace resulta absolutamente impredecible. Pretender hacer un pronóstico de lo que va a suceder es limitarse a ofrecer un punto de vista simplista y estático del futuro. Ante ello, es necesario intuir los diferentes escenarios probables y, si se puede, también los posibles y preparar estrategias de respuesta adecuadas para cada caso.

¿Cuáles son los diferentes escenarios que se le plantean a Murdoch de aquí en adelante?

La esencia del marketing podría definirse como el sentido común aplicado a los negocios. Si eres capaz de sentir como el común de tu público objetivo, en todo lo que hagas o digas, acertarás. Pero, ante la obviedad de que esto resulta materialmente imposible, aparecen las técnicas de investigación y la estrategia. Determinar los posibles escenarios ante una crisis es una tarea simple pero ardua. Para ello conviene rodearse de un equipo amplio y variopinto de personas, capaces de aportar diferentes perspectivas al asunto.

Hecha esta salvedad, sin la cual mi análisis sería tan temerario, infundado e insustancial como otros que se han hecho, me limito a llamar la atención sobre dos riesgos que, a mi juicio, ya han marcado la primera fase de la crisis y que, de no tratarse adecuadamente, tras éste parón vacacional de agosto, pueden complicarle el asunto al equipo de Murdoch.

En primer lugar, es obvio pensar que si los medios de información no hicieran eco del asunto, la crisis se diluiría rápidamente. A este respecto, puedo suponer que la simpatía que despiertan en mi, mis colegas de Lexicon y Edelman, debe ser similar a la que produce Murdoch y su grupo en el resto de medios británicos, australianos y norteamericanos, es decir ninguna. Como venimos diciendo desde hace mucho tiempo, mucho antes de que empezara a decirlo Burson Marsteller, las bases para solucionar una crisis se sientan antes de que esta se produzca; por lo que no quiero dejar pasar la oportunidad que me brinda, para invitar a mis colegas de profesión a tomar un café y charlar sobre el futuro (bromea Jaime Avila).

En segundo lugar, como ya advirtieron ustedes hace unos días en un artículo publicado en este blog, el caso Murdoch está siendo utilizado por la clase política de medio mundo, principalmente por David Cameron en el Reino Unido, para intentar asestar un golpe a la libertad de prensa. A este respecto, el mejor escenario que se le puede presentar a Murdoch a corto plazo, es que se radicalicen y prolonguen en el tiempo los conflictos sociales en Inglaterra. De momento los manifestantes han conseguido distraer la atención de Cameron de los medios tradicionales hacia Internet y la telefonía móvil. Parece que lo realmente importante ahora es controlar las redes sociales y los servicios de mensajería.

De esta forma tenemos por una parte a unos medios dispuesto a difundir y magnificar el mensaje y dos posibles detonantes, el interés político y la actualidad que marque el propio proceso penal.

¿Cómo cree que afectarán las revueltas sociales al caso Murdoch?

Sin lugar a dudas las revueltas sociales han puesto de manifiesto los graves problemas sociales que existen en Gran Bretaña, lo que, a mi juicio, ha retirado protagonismo al caso Murdoch. Por otro lado, David Cameron se ha buscado nuevos enemigos al enfrentarse directamente a la policía y a amplios sectores de la sociedad británica. Creo que tras las revueltas Murdoch se enfrenta a un David Cameron debilitado, que ha perdido su credibilidad ante amplios sectores de la opinión pública y que tiene demasiados frentes abiertos, por lo que va a necesitar el apoyo de los medios de información. El escenario actual es más favorable para Murdoch de lo que cabía suponer a primeros de agosto.

A partir de aquí ¿qué va a ocurrir?, ¿Cómo debe actuar News Corporation?

Aunque, como ya le he comentado, es materialmente imposible predecir el futuro, si es posible influir en él. Es decir aunque resulta imposible saber el resultado de la próxima tirada, es posible lanzar la moneda de forma que se fuerce un resultado determinado. Para poder aproximarnos a lo deseado debemos favorecer ciertas condiciones que nos permitan influir en el futuro. A Murdoch, en este momento le interesa:

– que se prolongue el debate social sobre los hechos ocurridos a principios de agosto y sobre el control administrativo de las redes sociales, el derecho de las personas a emitir y recibir información utilizando para ello cualquier medio, la presunción de inocencia de los usuarios de las tecnologías …

– implicar a los medios de información en una defensa de la libertad de expresión, ante cualquier intento del ejecutivo de aprovechar este hecho aislado del News of the World, para crear un clima de alarma social que justifique la intervención.

Y tiene capacidad sobrada para hacerlo.

Paralelamente, creo que Murdoch podría tener planificado un golpe de efecto para, llegado el caso, aislar definitivamente el problema en su propia persona. De esta forma, al retirarse de las tareas de dirección del Grupo, podría asumir personalmente toda la responsabilidad social y dejar al frente de News Corporation a un nuevo equipo exento de cualquier tipo de responsabilidad. A este respecto, Rupert Murdoch ya ha dado los primeros pasos al declarar el pasado 11 de agosto que, en el caso de abandonar definitivamente su cargo, el consejero delegado de News Corp, Chase Carey, será la persona elegida para reemplazarle.

Según el diario británico The Guardian, las muestras de arrepentimiento público de Murdoch llegaron después de que News Corp. contratara a Edelman Communications. En este mismo sentido, la revista norteamericana ADweek asegura que hasta la firma del contrato con esta firma de relaciones públicas, el magnate australiano y su hijo, James Murdoch -presidente de News International-, se negaban a comparecer ante una comisión parlamentaria para dar explicaciones ¿Qué opina Ud. al respecto?

No creo que una persona como Murdoch y el equipo que le rodea se entreguen incondicionalmente a las decisiones de una agencia externa. Murdoch es plenamente consciente de que las consecuencias de esta crisis las va a pagar él, su familia y su grupo empresarial, por lo que en todo momento va a ser él quien tome las decisiones. La figura de Edelman creo que no es más que la de otro asesor al que escuchar antes de tomar una decisión.

Pero para mi, lo realmente llamativo del caso es que cuando unos medios recogen una información de estas características es por que alguien la ha filtrado y, en este caso, el único beneficiario de semejantes declaraciones sería el propio Edelman. Murdoch es un hombre mayor, al que se ha intentado humillar públicamente en una maniobra orquestada por la clase política británica, para distraer la atención de la opinión pública de los graves problemas sociales y económicos por los que atraviesa el país. Este es el mensaje que se debería haber filtrado a los medios y no el de un hombre soberbio que hasta la llegada de Edelman se negaba a colaborar con el gobierno.

¿Le hubiese aconsejado Ud. a Murdoch acudir a declarar al Parlamento?

No creo que hubiese tenido la oportunidad de aconsejárselo, llegados a un punto estoy convencido que todo el mundo, empezando por el propio Murdoch, eran plenamente conscientes de que no quedaba otro remedio. Que les desagradase tener que participar en semejante pantomima, lo entiendo, a mi también y no tengo nada que ver en el asunto.

De cualquier forma la estrategia de comunicación debe adaptarse a las características del portavoz que la debe defender o viceversa. En esta ocasión, Murdoch era el portavoz perfecto para la situación. Bajo la piel de un anciano venerable “arrastrado a los pies de los caballos” por unos políticos incapaces tan siquiera de proteger su integridad física, se esconde un gran negociador acostumbrado a manejar situaciones complejas, un hombre muy persuasivo y extremadamente inteligente.

¿Y los programas de formación de portavoces?

Están muy bien para rellenar curiculum y para con tiempo, práctica y trabajo pulir defectos y mejorar determinados aspectos. Pero un portavoz debe, ante todo, transmitir credibilidad y la única forma de hacerlo es siendo uno mismo. Uno de los mayores errores que cometen las agencias es intentar que las personas actúen durante sus intervenciones públicas. Son directivos, no actores y, en el caso de una crisis, se juegan mucho ante un público extremadamente crítico y suspicaz.

Muchas gracias por toda la información que nos ha aportado y esperamos seguir contando con su colaboración.

Muchas gracias a ustedes por haberme brindado la oportunidad.

A. Rodríguez
Redactor corresponsal España y Portugal
 

La estupidez tiene las patas aún más cortas que la propia mentira.

agosto 22nd, 2011

«Estamos trabajando con la policía, los servicios de inteligencia -MI5- y la industria para ver si estaría bien frenar a la gente que usa estas webs y servicios para comunicarse cuando sabemos que están incitando a la violencia, el desorden y la criminalidad», manifestó el líder tory en el Parlamento.

El pasado jueves 11 de agosto, el Primer Ministro británico, David Cameron, “visiblemente molesto” tras tener que interrumpir sus vacaciones en Villa Petrolo, una lujosa villa privada en Chianti, en la Toscana Italiana, prometió que se intervendrían las redes sociales, como Twitter, Facebook y Blackberry Messenger, que se empleasen en actos delictivos.

Tras aprovechar el “caso Murdoc” para anunciar medidas de control del ejecutivo sobre los contenidos periodísticos que se vierten en los medios de información, ahora arremete contra los medios digitales que permiten la comunicación interpersonal. ¿Qué será lo próximo, el teléfono tradicional? Y después ¿qué?, ¿los tambores?

“Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión.” (Artículo 19 de la Declaración Universal de Derechos Humanos)

El derecho a la libertad de expresión radica, fundamentalmente, en el reconocimiento de que todos las personas gozan de la facultad de trasmitir información y expresar sus ideas sin censura previa.  Esto es, sin un control previo de “las autoridades” sobre lo que se va a decir, pero asumiendo toda la  responsabilidad que se derive de ésta, si la trasmisión de la información tiene como finalidad la comisión de un delito.

David Cameron, aunque podría, no debería prohibir la venta de martillos para evitar la posible comisión de un delito de asesinato. El común de los ciudadanos no utilizamos ni los martillos ni las redes sociales para delinquir y, el día que alguien lo haga, es función de la policía perseguir el delito y poner a los criminales a disposición judicial.

Al igual que la policía no debería suplantar a los jueces condenando y ejecutando a los sospechosos (supuesto origen de todo el problema), David Cameron debería demostrar más respeto hacia la labor de la policía y la independencia del poder judicial, como le ha tenido que recordar la propia policía británica. El presidente de la Asociación de Jefes de Policía, Sir Hugh Orde, declaró que el primer ministro Cameron y la ministra del Interior, Theresa May, se equivocaban al reivindicar como propia la decisión de desplegar dieciseis mil policías en las calles y adoptar tácticas más expeditivas. Orde, señaló que los políticos no “tenían ninguna potestad” en estas decisiones y que ambas habían sido planeadas antes de que Cameron y May regresaran de sus vacaciones. “El hecho de que los políticos volvieran es irrelevante en términos de las tácticas que empleamos”, señaló Orde. El jefe interino de Scotland Yard, Tim Godwin, indicó que las críticas «fueron hechas por personas que no estuvieron allí», mientras que el vicedirector de la Federación Policial, que representa a oficiales y agentes, Simor Reed, tildó de “barato” el mensaje gubernamental de que la policía había cambiado de tácticas gracias a la recomendación de las autoridades políticas.

David Cameron empleó su lenguaje más contundente para asegurar que el Gobierno hará «todo lo que sea necesario» para restablecer el orden en un país conmocionado por un vandalismo sin precedentes. Cameron acusó a las redes sociales como Facebook, Twitter y servicios como BlackBerry Messenger, de extender el radio de acción de los responsables de los disturbios, asegurando ante el Parlamento que están estudiando la posibilidad de prohibir su utilización, si se tiene indicios de que se está organizando alguna actividad criminal. «Todo el mundo ve que estas acciones horribles se organizaron a través de estos medios de comunicación social. La libre circulación de información puede ser usada para el bien, pero también puede ser utilizada para mal, y cuando la gente los utiliza para la violencia tenemos que detenerlos «, comentó Cameron haciendo gala de una gran agudeza intelectual.

¿Y la sublevación campesina de 1381?, “infinitamente” más violenta y extensa, ¿también la provocaron  Facebook, Twitter y BlackBerry Messenger o fueron las famosas «poll-tax», unidas a los efectos generales de la crisis del siglo, las malas prácticas de las clases dominantes y la animadversión que existía contra algunos hombres públicos? Y, por no retroceder tanto en el tiempo, las revueltas sociales de los años 80 contra los gobiernos de Margaret Thatcher, ¿también fueron responsabilidad de unas redes sociales que no existían, o nuevamente se volvió a tratar de unas medidas fiscales abusivas y discriminatorias?

«Hubo un montón de datos e información falsa rondando Twitter y BlackBerry Messenger y otras redes. Necesitamos un trabajo importante para asegurarnos de que la policía tenga todas las capacidades tecnológicos necesarias para cazar y vencer a los criminales», agregó Cameron. A título personal y sin que sirva de precedente, me atrevería recomendar al señor Cameron que antes de cancelar los derechos fundamentales de las personas, dote de medios a la policía británica, como le piden desde la oposición y la alcaldía de Londres. A este respecto y como ejemplo a seguir, podría comenzar por los 11.000 euros semanales de la mansión en la que se ha hospedado este verano, a los que hay que sumar los gastos de alojamiento de parte de su séquito personal en los hoteles de la zona.

El mandatario también pidió a las redes sociales eliminar mensajes, imágenes y videos que inciten a más disturbios, al afirmar que las empresas tienen «responsabilidad» en su difusión. Además, el primer ministro aseguró que las emisoras de televisión -incluidas la BBC y Sky News- tienen la responsabilidad de entregar a la policía todo el material no utilizado que posean sobre los disturbios. Esta medida puede encontrar resistencia por parte de las cadenas, ya que puede vulnerar el secreto profesional de los periodistas. En Gran Bretaña el Contempt of Court Act de1981 afirma textualmente: «Ningún tribunal podrá pedir al responsable de una publicación que revele sus fuentes de información, a menos que el tribunal considere probado que el conocimiento de la identidad de la fuente sea precisa para la defensa de los intereses de la seguridad nacional o para la prevención de un crimen», por lo que este requerimiento debería ser realizado por un Juez y no por el señor Cameron.

No creo que el problema se solucione trasladando mensajes incoherentes a la opinión publica que ponen, de una forma u otra, en tela de juicio la integridad de los medios de comunicación. A modo de “punta de iceberg”, tras las amenazas públicas de Cameron y las subsiguientes declaraciones conciliadoras de la compañía, el blog oficial de Research In Motion (RIM), empresa fabricante de BlackBerry, fue atacado por piratas informáticos, que acusaban a la compañía de afectar a terceros si decidían cooperar con el Gobierno británico.

Tampoco creo que la solución sea negar la existencia de un problema de carácter social como aseguró Cameron: «esto es delincuencia pura y simple y tiene que ser confrontada y derrotada»; ni encarcelar a niños de 11 años «si sois lo suficientemente mayores para cometer estos delitos, sois lo suficientemente mayores para enfrentaros a los castigos», manifestó el primer ministro. Cabe destacar que estas amenazas de Cameron, van más allá de su habitual pataleta, ya que, en este caso, están respaldadas por la ley, que establece la edad penal en Inglaterra en diez años, aplicándose a los menores las mismas penas que a los adultos.

Por último, contratar al “hombre del saco” en la figura de Bill Bratton, un ex jefe de la policía de Nueva York, Boston y Los Ángeles para poner orden en el Reino Unido, tampoco creemos que vaya a aportar nada más que añadir tensión social y enrarecer aún más las relaciones entre la policía y el ejecutivo. “Muchos jóvenes, especialmente los miembros de bandas, se envalentonaron por un exceso de cautela policial y lo tolerante de las sentencias”. «Los jóvenes matones deberían temer a la policía» afirmó Bratton.

La temen y la odian señor Bratton y ese es el origen de todo el problema, eso y la falta de esperanza en un futuro propio para un gran número de jóvenes de clases acomodadas; lo que el señor Cameron llama «falta de valores éticos y morales». Esos jóvenes que usted cree que no le temen, son la consecuencia del aumento de la pobreza y la exclusión social para un porcentaje amplio de la sociedad británica (más de 13 millones de personas viven bajo la línea de pobreza, uno de cada cinco adultos y uno de cada cuatro niños) “Los policías no nos hablan nunca, nos ignoran. Piensan que no somos humanos, entonces el odio es recíproco”, explicó un joven del barrio que se identificó como “africano”. “Todo el tiempo nos piden documentos, nos controlan como criminales porque somos negros y encima usamos capuchas o gorros”, agregó.

Me atrevería recomendar al señor Cameron, por segunda vez en un artículo, que en lugar de buscar asesoramiento en un neoyorquino bravucón, busque consejo entre sus propios compatriotas, empezando por releer el  sermón de Thomas Case, en 1641 ante la Cámara de los Comunes: «La reforma debe ser universal… Reformad todos los lugares, a todas las personas y profesiones … Reformad los tribunales de justicia, los magistrados inferiores… Reformad las universidades, reformad las ciudades, reformad los condados, reformad las escuelas primarias, reformad el Sabbath,  las ordenanzas, el culto divino …  Usted tiene más trabajo que hacer que todo lo que yo pueda decir …”

Simón de María
Redactor Centroamerica y EE.UU
 

Burson-Marsteller asume voluntariamente la responsabilidad de educar a los ciudadanos de medio mundo. Todo un ejemplo de RSC

agosto 5th, 2011

Hasta hace poco tiempo en la Web Site de Burson-Marsteller podiamos leer: “Campañas de educación pública”

“No hemos inventado los esquemas con los que trabajamos: emisor, mensaje y receptor. Son la esencia de la comunicación. Sin embargo, las llamamos campañas de sensibilización pública porque tienen unas características específicas. Y son tan necesarias para el emisor cuando éste se ubica en el ámbito público, como cuando procede del ámbito privado. La única diferencia radica, quizás, en la percepción que la sociedad tiene de ellas. Se consideran no sólo inocuas, sino muy necesarias, cuando las ONGs o los Gobiernos las promueven y sospechosas, a veces, cuando el emisor pertenece al sector privado.”

“En Burson-Marsteller creemos que las corporaciones, ya sea a título individual o a través de asociaciones sectoriales, tienen todo el derecho a realizar campañas de sensibilización ante su público objetivo. Nuestro reto es ayudarles a que sus mensajes y posiciones lleguen a la sociedad definiendo campañas objetivas y rigurosas.”

“Al tratarse de campañas impulsadas por empresas o asociaciones que, en ocasiones, es preferible que no se conozcan, garantizamos la confidencialidad sobre nuestros clientes. Indicamos únicamente los sectores a los que pertenecen o el hábito/mal hábito sobre el que se trabajaba en las campañas.”

Así de claros se mostraban nuestros colegas de Burson-Marsteller, hasta hace poco, en su página Web (para ver la segunda versión que ofrecieron de este texto antes de retirarlo definitivamente, haga click sobre la imágen y amplíela). La primera vez que lo leí, reconozco que no le di ningún crédito. “Estos de Burson-Marsteller ya no saben que inventarse para vender algún valor diferencial” pensé. Inmediatamente me asaltó la duda, ¿a ver si el documental de Morgan Spurlock “Super size me”, conocido en el mundo Hispano como “Súper engórdame” va a ser una “campañas de sensibilización” promovida por alguno de nuestros colegas? ¡No imposible, no se puede caer tan bajo! Lo alejé inmediatamente de mi mente; aunque, por otra parte, los “ingredientes” resultan algo sospechosos: un cineasta independiente que intenta abrirse camino, un “protagonista” que, según diferentes fuentes, puede padecer algún trastorno de personalidad …

De cualquier manera y fuera quien fuese, el hecho es que Donald Gorske, en febrero de 2003, para demostrar lo perjudicial que podían llegar a ser las hamburguesas, concretamente las de McDonald’s, pasó 30 días alimentándose única y exclusivamente de Big Macs. Durante el rodaje del documental, Gorske consumió un promedio de 5000 kcal diarias en Big Macs (9,26 unidades diarias). Después de treinta días, según los autores de dicho documental había ganado 11,1 kg y aumentó su masa corporal un 13%. Paralelamente, experimentó cambios de humor, disfunción sexual y daños en el hígado. A la hora de analizar la noticia, tengan ustedes en cuenta que si en lugar de hamburguesas hubiese consumido 5000 kcal diarias en tomates, habría engordado lo mismo y se habría cogido la gota, por lo que tampoco estaría para muchas florituras sexuales.

Esta elucubraciones que hasta hace unos días no tenían ni pies ni cabeza, han empezado a cobrar cierto sentido con unos acontecimientos que se han producido recientemente. Como todos saben, el pasado día 3 de mayo, Christopher Soghoian, ex-investigador de la Comisión Federal de Comercio (FTC) para la prevención de prácticas comerciales fraudulentas, engañosas y desleales, informaba en su blog que John Mercurio de Burson-Marsteller, había intentando influir sobre él para que publicase información negativa acerca de Google. Al parecer Burson-Marsteller había sido contratado por una tercera compañía, que prefería mantener el anonimato, para “educar a la opinión publica” sobre supuestas malas prácticas que Google comete en materia de privacidad y derecho a la intimidad de los consumidores.

Esto que para Burson-Marsteller no es mas que el ejercicio del derecho de sus clientes a “realizar campañas de sensibilización ante su público objetivo”, “ya sea a título individual o a través de asociaciones sectoriales”, a otros nos parece una práctica que, en muchos países de nuestro entorno, puede llegar a ser constitutivas de un presunto delito de competencia desleal.

Pero aunque pueda parecer extraño, nosotros no criticamos esta práctica, todo lo contrario, cuando hace años descubrimos este servicio que nos proponía Burson-Marsteller en su página Web, al escepticismo inicial, le siguió cierto respeto: “Esta gente se atreve a hablar claro y decir lo que hacen sin tapujos; si además lo saben hacer bien, aunque yo no lo haría, ¡chapeau!”.

Nuestra profunda decepción no viene provocada, ni tan siquiera, por que no lo hayan sabido hacer, demostrando una gran torpeza y un total desconocimiento sobre las personas a las que se dirigen; sino por la respuesta poco profesional que le han dado a la “crisis” consecuencia de su mal hacer.

En primer lugar, no fueron capaces de garantizar la confidencialidad de su cliente, que según informó The Daily Beast, se trataba de Facebook. En segundo lugar, lejos de asumir la responsabilidad ante la opinión pública para defender y preservar la imagen de Facebook, con objeto de proyectar toda la responsabilidad de lo ocurrido sobre su cliente, se limitaron a declarar que “la tarea solicitada por Facebook debió haber sido declinada”. ¿Como que la tarea solicitada? Los que ofrecían este servicio abiertamente, aderezado con unos toques de RSC, eran ustedes señores de Burson-Marsteller.

A este respecto, Facebook declaró que contrató a Burson-Marsteller para exponer algunas cosas que Google estaba haciendo y que exponían la privacidad de los internautas, pero rechazó haber autorizado una campaña de desprestigio. “En vez de eso, queríamos que terceros involucrados verificaran que la gente no había autorizado la recolección y el uso de su información en Facebook y otros servicios, para que Google los incluyera en sus círculos sociales, así como el que Facebook no autorizaba dicha acción”, explicó la empresa.

Aunque personalmente creo que fue una estrategia acordada mutuamente, si estuviera en la obligación de creer a alguien, me decantaría por Facebook; no hay más que ver la información que Burson-Marsteller ofrecía en su Web para presentar este servicio y como se apresuró a eliminarla al inicio de la crisis.

Por último tampoco nos ha gustado como ha gestionado Burson-Marsteller su propia crisis. Reaccionaron, como ellos mismos han criticado mil veces, de una manera muy poco profesional: mintiendo y negando la evidencia en un primer momento y dando la callada por respuesta cuando finalmente se vieron acorralados, eso si, tras acusar veladamente a su cliente. Todo un ejemplo de lo que no se debe hacer.

Simón de María
Redactor Centroamerica y EE.UU
 

Las Spamers spameadas. Hay que ver como ha cambiado el cuento.

agosto 1st, 2011

El pasado martes 26 de julio se organizó un pequeño revuelo entre algunas agencias de relaciones públicas españolas –showrooms de moda- y un medio de información.

Por situar la historia, el día 21 de julio de 2011, la revista digital www.eldebate21.com, nos envió a algunos profesionales del mundo de la información el sumario de noticias que ofrecería su publicación al día siguiente (viernes 22). El martes 26 de julio, cuatro días después, Arancha Almela de la agencia Lina Ortas Comunicación, decide responder al medio para solicitar ser retirada de la lista.  Pero, según declaraciones de la propia Arancha, involuntariamente respondió a toda la lista.

Como descubrimos finalmente, algunos “profesionales de las relaciones públicas” entendieron que se trataba de una cuestión de pensamiento político y se apresuraron a dejar claro su posicionamiento a todos los que conformábamos la lista.

Unos pocos como Lola Bañón de LB Press Comunicación, se sumaron a la crítica sin perder los modales, “Agradecería por favor me dieran de baja de su nwesletter saludos”. Otros, como Mayte Salvador de Intro Ibérica, expresaron su estupor y nerviosismo por encontrarse en una lista que había sido cuestionada públicamente por sus colegas: “A mi también me encantaría que me quitasen de esta distribución. No sé cómo estoy en ella, y no me apetece nada seguir….”. Ruth Alonso también de Intro Ibérica secunda a su compañera “Opino lo mismo ¡quiero darme de baja YA!”

Desde Elena Hernández Comunicación, Miriam García opinaba algo parecido “Yo tampoco sé como he llegado a esta lista. También quiero darme de baja. Gracias”. Por su parte, la propia Elena Hernández, fundadora de dicha agencia, nos dejaba claro que ella va unos pasos por delante de los demás, asegurando “Ya pedi mi baja hace muxo tiempo y sigo recibiéndola! Pls no me la manden más”. Otros como Idoia Farràs y Alba Gomez Zabalo de Orbyce Comunicación se lo tomaron como algo personal y, con un cierto sabor despechado, se sumaban a la protesta: “Yo también lo agradecería, no quiero recibir nada más vuestro Gracias”.

A estas alturas, en la que los miembros de la lista no entendíamos nada, pero empezábamos a estar un poco hartos, recibimos el mail de Rosa Porras, public relations manager de Coty Lancaster Beauty Group, que terminó de dejarnos totalmente desconcertados: “Yo tb xfavor baja”. Personalmente, tengo que reconocer que llamé a algunos amigos del sector. “¿tu sabes que les pasa a estas mujeres?, pero nadie sabía nada, ¿qué les habrían hecho para que se pusiesen así? Sobre todo a esta última, ¡el sock le había dejado literalmente sin palabras!

Para entonces yo ya estaba enganchado al culebrón, solicité que, por favor, me pasaran todos los e-mails en cuanto se recibiesen. Virginia Garcia, Berta Fernandez Gonzalez, El hombre tranquilo, … se unían a la lista de personas que pedían la baja de “esa lista de distribución”. De repente, un anónimo de “Bonjour Comunicación” termino con horas de suspense: “Buenos días, A mi también me gustaría que me dieran de baja. No sé tampoco como estoy en ella. No comparto ni ideas ni contenido de esta newsletter, no quiero seguir recibiendola. Gracias por darme de baja cuanto antes”. Lo que hasta entonces parecía un turbio asunto “rosa”, tomaba cierto cariz político.

Mientras, las autenticas “marujas” de esta historia, entre las que me incluyo, disfrutábamos de lo lindo: “yo creo que detrás de “El hombre tranquilo” se esconde una mujer” sostenía una de las mentes calenturientas; “que dices hombre, en un show-room de moda, blanco y en botella”; “dejar de decir tonterías, ni tan siquiera sabéis si trabaja en un show-room” se imponía la cordura; “oye, que nosotros también somos progresistas, no te vayas a creer, para nosotros la diversidad en la identidad sexual es tan patrimonio cultural como la diversidad lingüística” nos excusábamos avergonzados ante la reprimenda de nuestra interlocutora …

Como decía, mientras las autenticas “marujas” de esta historia disfrutábamos de la mañana del martes, algunas profesionales del sector intentaron lidiar en el asunto para cortar el espectáculo que estaban dando sus colegas. La primera en pisar la arena fue Esther Palma de Esther Palma Comunicación: “Nos esta llegando de rebote a todo el mundo este mail, y ellos no lo reciben os lo digo para que lo sepáis”. “Blandita, ha sido muy blandita” comentábamos en la discusión paralela; “Que dices, ¿tu sabes las agallas que hay que tener para meterse en medio de eso?”; “ya te digo”… La siguiente en saltar al ruedo creo recordar que fue Nieves Escobedo de Roatán Comunicación: “No sé si os estáis dando cuenta…. pero al responder, estáis reenviando el correo a todas las direcciones de correo incluídas, y afectadas por ese envío inicial. Yo también quiero darme de baja… pero la via deberá ser otra”. Ya se pueden imaginar ustedes la acogida que brindamos a semejantes declaraciones: “pues claro que se han dado cuenta, la única que parece que no se da cuenta es ella”; “hombre, la chica está queriendo ser educada”; “lo que le pasa es que tiene el síndrome de Estocolmo”; “pero como puede decir alguien que hay victimas afectadas por ese envío inicial”…

Silencio y pitos respectivamente, cuando parecía que nadie iba a poder poner fin a esto, irrumpió en el coso Elena Martín, de SIM Servicios Integrales de Marketing. Tengo que reconocer, y ahora estoy hablando en serio, que todavía estoy impresionado. Con un escueto y contundente: “Por favor, dejen de contestar a todos. Gracias” dio por zanjada la cuestión. Nadie, ni tan siquiera el típico despistado, osó a enviar un mail más criticando al medio de información. Los mails de admiración en la distribución paralela se sucedían : “¿alguien conoce a esa chica?”; “eso es autoridad y lo demás son tonterías”; “si no la contratas tu, la contrato yo, para que ponga aquí un poco de orden” …

He respetado literalmente los textos enviados en los correos, por lo que las faltas de ortografía o gramaticales son responsabilidad exclusiva de sus autoras. Aprovecho la salvedad para excusar a los profesionales de los show-rooms, ya que su trabajo consiste en gestionar el préstamo de ropa y complementos a las estilistas de los medios de información, series de televisión, … Por tanto, para adecuar las noticias de sus clientes al interés general, no tienen porque estar al tanto de la actualidad informativa. Además, visto lo visto, parece que tampoco tienen que mantener una relación cordial y de respeto mutuo con la mayoría de los medios de información.

A los que no alcanzo a entender, es a los gabinetes de prensa que se han dejado arrastrar en esta critica abierta a la actividad informativa, la profesionalidad y la ética de un medio de información. Cuando se visita por primera vez www.eldebate21.com, lo primero que llama la atención a cualquier persona con un mínimo de experiencia, es la calidad de los contenidos. No es un Blog de “corta-pega”, ni una pequeña revista on-line. La mayoría de las noticias son de elaboración propia y de una calidad muy alta, tanto por su redacción, como por su originalidad, actualidad y planteamiento informativo. Tanto es así que mi primera impresión fue la de que detrás de esta revista había, por continuar con el argot taurino, un primera espada del periodismo español. Como tengo que reconocer que soy por naturaleza curioso, puse todos los medios a mi alcance para averiguar de quién podía tratarse.

Al final, resulta que todas estas personas están en esa lista de distribución por que llevan años bombardeando con comunicados basura al que ahora critican. Es habitual en algunos profesionales del sector de las relaciones públicas, adular en exceso a los periodistas de determinados medios de su interés, al tiempo que intentan ningunear a otros. Estas personas todavía no se han dado cuenta que el periodismo es una de las profesiones con mayor movilidad y que mañana volverán a ser serviles con los mismos profesional a los que hoy ofenden, naturalmente, si estos últimos se lo permiten.

Pero este no es el caso que nos ocupa, ya que según hemos podido constatar detrás de www.eldebate21.com, se encuentra uno de los cincuenta periodistas más influyentes en España. Y digo cincuenta por curarme en salud y no ofender a nadie. Hablamos de un profesional con amplia experiencia en la dirección de redacciones, que ha desarrollado toda su carrera en diarios de información con una alta tradición democrática y un posicionamiento moderado y centrista. Alguien que merece todo nuestro respeto y que también debería merecer el de cualquier profesional de las relaciones públicas.

A. Rodríguez
Redactor



 

Punto 9º de la declaración de principios sobre la conducta de los periodistas, adoptada por el congreso mundial de la Federación Internacional de Periodistas en 1954 y enmendada por el congreso mundial en 1986.

julio 28th, 2011

9. Todo periodista digno de llamarse tal se impone el deber de cumplir estrictamente con los principios enunciados arriba. En el marco del derecho vigente en cada país, el periodista soló aceptará, en materia profesional la jurisdicción de sus iguales, excluyendo cualquier injerencia gubernamental o de otro tipo.

Aprovechando lo que ellos dan en llamar el “escándalo de las escuchas telefónicas ilegales que está viviendo la prensa británica”, FeSP hace un llamamiento a los partidos políticos para que constituyan organismos de corregulación independientes en España que favorezcan lo que denominan «control democrático de los medios de comunicación». Según declaraciones a Periodista Digital, “en dichos organismos, habría presencia de dos «técnicos» nombrados por el Gobierno: uno representando a la judicatura y otro al Ministerio del Interior. También formarían parte las organizaciones de periodistas (incluidos los sindicatos) y de usuarios de la comunicación, así como las universidades y las organizaciones de las empresas de medios”.

El FeSP que cuenta con 2.500 periodistas afiliados (300 de ellos delegados y liberados sindicales*) de un total de 70.000 licenciados y 25.000 periodistas que aún conservan su puesto de trabajo en España, sostiene que “la autorregulación de los medios de comunicación no funciona y no basta para que respeten unas normas éticas”. Además, en su comunicado aseguran que si los partidos no siguen sus indicaciones, “estarán impidiendo que los medios españoles lleguen a su edad adulta y continuarán mermando la calidad de la democracia española, como ya denuncian muchos miles de ciudadanos en las calles y plazas de las ciudades” (haciendo una clara alusión a las protestas del “movimiento 15-M”).

Según ha declarado Dardo Gómez, secretario general de la FeSP, a Periodista Digital, “se propone el poder actuar de oficio ante vulneraciones evidentes y el poder de aceptar y tratar las denuncias que hagan los usuarios con respecto a la vulneración que se haga”. Por lo que respecta a la capacidad sancionadora, Gómez sostiene que “Si esto entra por una ley, algún tipo de sanción tiene que haber. No existe ninguna ley en el mundo que quien la vulnere no responda de ninguna manera”.

A. Rodríguez
Redactor corresponsal España y Portugal

 

* Fuente sindicato UGT: «Una persona “liberada” es alguien al que se le ha librado de sus funciones laborales normales y pasa a hacer basicamente actividad sindical. Es decir, a lo práctico, alguien que tiene un 90% de su jornada laboral dedicada a hacer sindicalismo y no a realizar trabajo en su empresa.

«¿Cómo se consigue?. Todos los delegados laborales tienen derecho a horas mensuales que se le libera de su actividad laboral ordinaria y pasarían a realizar actividades sindicales. Estas horas dependen del tamaño de las empresas según la Ley Orgánica de Libertad Sindical:

–         Empresas de o a 100 trabajadores: 15 horas sindicales al mes.
–         Empresas de 101 a 250 trabajadores: 20 horas sindicales al mes.
–         Empresas de 251 a 500 trabajadores: 30 horas sindicales al mes.
–         Empresas de mas de 501 trabajadores: 40 horas sindicales al mes.

La gracia de estas horas es que son acumulables y transferibles. Es decir que si un comité de empresa de 7 trabajadores decide legar todas las horas sindicales en una sóla persona esta estaría prácticamente liberada y no tendría que trabajar.»

 

Decir por decir algo.

julio 19th, 2011

Recientemente el IE University (una prestigiosa universidad española) y Kreab Gavin Anderson han presentado el I Informe “Los perfiles universitarios más demandados por las empresas en España”. Aparentemente, Francisco Mata, coordinador del estudio y decano de estudios de grado de IE University nos ofrece multitud de datos de gran interés:

– el 71% de las empresas encuestadas prefiere un titulado con una educación interdisciplinar porque aprende más rápido … les importa más formar a personas que a técnicos”

– al 94% de las empresas les importa el prestigio de la universidad de procedencia de los candidatos.

– el 62% de las empresas encuestadas considera que un título de una universidad internacional aporta valor al candidato.

–  el 51% de las empresas prefieren que las personas que se incorporan a su plantilla no tengan experiencia laboral previa para poder formarles. No obstante, en cuanto a las prácticas de verano, todas las empresas encuestadas consideran imprescindible esta experiencia durante los estudios de grado.

– etc.

Fuente: Roberto Arribas – Jefe de Prensa de IE University

Como en cualquier trabajo de investigación serio, en la nota de prensa se hace referencia a la metodología seguida para la elaboración de estos datos: “El informe se ha elaborado a través de un cuestionario online enviado a las direcciones de RRHH de más de 100 empresas procedentes del IBEX 35, el ranking de “Best places to work” 2010 y MERCO EMPRESAS 2010 durante los meses de mayo y junio de 2011”, explica el comunicado.

Lo primero que llama la atención es que se haga referencia a los cuestionarios enviados y no a los cuestionarios recibidos que, finalmente, resultaron ser tan solo 38. En segundo lugar la elección de la muestra:

– las 35 empresas con más liquidez que cotizan en el Sistema Interconexión Bursátil Electrónico (SIBE) en las cuatro Bolsas Españolas (Madrid, Barcelona, Bilbao y Valencia).

– las 50 Mejores Empresas para Trabajar en España según la consultora norteamericana Great Place to Work® Institute, Inc.

– las 100 empresas con mejor reputación interna según la empresa española Villalafañe & Asociados Consultores S.L.

Una vez de-duplicadas las bases de datos, las más de 100 empresas del  comunicado, resultaron ser tan solo 100 según el estudio y al contarlas a mi me salen tan solo 82. Si estas 82 empresas son el “universo” como aseguran en el informe, el título del estudio y del comunicado es engañoso y la investigación es, cuando menos, un tanto “sui géneris” (sobraría cualquier otro comentario).

Pero aún mas, de cualquiera de las maneras posibles que lo analicemos, el estudio no tiene ninguna significatividad estadística, en primer lugar porque la muestra no es aleatoria y, en segundo lugar, porque no es suficiente (38 encuestas). Por tanto, ninguno de los porcentajes que se ofrecen tiene ninguna validez estadística.

Volviendo a la estrategia que es lo que nos interesa, el eje de comunicación que parece querer seguir el IE University podría ser algo similar a: “Las mejores empresas en las que trabajar buscan en las personas, lo que nosotros le podemos ofrecer a su hijo.”

Pero mucho cuidado con este tipo de estrategias, porque se pueden terminar volviendo en nuestra contra. Si hay algo claro es que cada colectivo interpreta la información de forma totalmente diferente, así un periodista puede interpretar la noticia de esta otra manera: “si el IE University elabora estudios de esta calidad, como no serán el resto de estudios que me ofrecen” y esta interpretación es la que me preocupa, ya que está haciendo mucho daño a nuestro sector. A este respecto me gustaría hacer referencia al tratamiento impecable que da a la noticia Agencia EFE: “No obstante, para sus conclusiones se han recogido las respuestas de 38 empresas, aquellas cuyos responsables de la dirección de recursos humanos contestaron las preguntas.” aclara el periodista. 

Otra posible interpretación es la de un padre con cierta preparación, que podría llegar a plantearse: “¿No hay nadie en el IE University que tenga nociones básicas de estadística aplicada al muestreo? o, si lo hay, ¿todavía no se han enterado que la relación con los diferentes públicos a través de los medios de información, se basan en la calidad de los contenidos y ésta comienza por la veracidad de los datos que se ofrecen?” Este mismo padre también podría cuestionarse si estos son los valores y el espíritu humanista en el que quiere formar a sus hijos.

Si necesitan ampararse en terceros para dar credibilidad a una tesis que aporta valor a su gama de servicios docentes, ¿no hubiese sido más fácil hablar de un estudio cualitativo realizado entre 38 … y ofrecer tendencias en lugar de porcentajes? Por que al estudio, presentado como lo que es o como nos lo presenta el propio D. Francisco Mata en su informe, no se le puede hacer ninguna objeción. El problema aparece cuando alguien, que parece no saber nada de estadística, lo transforma en estrategia de comunicación. Una estrategia que aporta muy poco en la construcción de la imagen pública del IE University, pero que puede socavar irreversiblemente su credibilidad. Supongo que en adelante, la Agencia EFE y nosotros mismos, analizaremos con lupa los estudios presentados por esta institución.

De cualquier manera, parto de la base que este análisis puede ser exagerado, que todos nos equivocamos en ocasiones, yo el primero, y que el  IE University es una universidad española que ha demostrado durante años un posicionamiento claro de calidad docente y ética en los negocios y no debe ser juzgada por un hecho aislado.

Simón de María
Redactor

 

¿Son las relaciones públicas las cloacas de la comunicación?

julio 13th, 2011

Eufemismo: término que sustituye a otro para designar lo mismo, ya que el primero se evita al tener connotaciones desagradables, terribles o indecorosas.

Paul TarjanSegún las conclusiones del European Communication Monitor 2011, el 42% de los responsables de comunicación y profesionales de relaciones públicas que trabajan en organizaciones y consultoras en Europa, considera que la denominación “Relaciones Públicas” (Public Relations -PR-) es un término que desacredita la profesión. Como consecuencia, muchos de los encuestados apuestan por utilizar otras alternativas para referirse a ella. Las preferidas son “Comunicación Corporativa” (68%), “Comunicación Estratégica” (61%) y “Gestión de la Comunicación” (56%).

Las palabras pueden encubrir, pero no cambiar la realidad de las cosas. A la larga, el nombre se acaba contagiando de la fealdad de lo nombrado. Y entonces, hay que buscarle repuesto. Se crean de esta manera cadenas de eufemismos que se desgastan y caducan. Por ejemplo, el lugar destinado a la “realización de ciertas necesidades fisiologicas” ha evolucionado apropiándose de términos que designaban actividades más honorables, hasta agotarlos despojándoles de su significado original:

Letrina – forma contraída de lavatrina que es el lugar donde uno se lava.
Retrete – lugar retirado.
Váter – agua, anglicismo derivado de water-closet.
Servicio, baño …

Ahora resulta que la culpa de todo la tiene el término “relaciones públicas”, no el conjunto de técnicas que la palabra denomina y engloba, ni, por supuesto, el mal uso que hacemos de ellas. ¿Son las relaciones públicas las que elaboran comunicados y estudios basura? y, ¿los correo basura, también son las relaciones públicas?. ¿No sería mejor que tratásemos las relaciones públicas con más respeto, en lugar de dedicarnos a pervertir el lenguaje?

Por lo que a mi respecta me quedo con agencias de relaciones públicas, agencias PR en spanglish. Cuando ese 42% de “comunicadores corporativos” dejen de utilizar las relaciones públicas como si de un inodoro se tratase, entonces el término y la profesión recobrarán poco a poco todo su esplendor.

 

Simón de María